La primera novela de la escritora y periodista

chaqueña Marina Nill sorprende gratamente al lector

por la minuciosa descripción de hechos

y personajes que se mueven dentro de un paisaje urbano propio,

entre las ciudades de Corrientes y Resistencia.

 

 

Una historia de ficción, pero posible; un relato contado en primera persona, moroso y prolijo; una veintena de personajes con identidad propia, con dramas cotidianos y aspiraciones que los mueven de aquí para allá, con una dinámica sorprendente; una mujer valiente, sacudida por una situación que jamás esperó protagonizar; una niña fantástica, adorable y terrible al mismo tiempo; y una muñeca animada por vaya a saberse qué espíritu proveniente del más allá...

Si hubiese que explicar en pocas líneas en qué consiste la primera novela de Marina Nill, el lector tendría una síntesis en el primer párrafo de este comentario. “Llamaradas de Recuerdos” es una historia de ficción, pero de un carácter tan extraordinariamente realista que la autora logra, mezclando con habilidad lo posible y el mundo de la imaginación, sumergir al lector en un placer intenso y continuado.

El paisaje cotidiano -la historia está ambientada entre las ciudades de Corrientes y Resistencia a fines de la década del ´80- colabora para que todo sea más creíble y lógico. El habla rioplatense está empleado con soltura, y al mismo se suman expresiones de un portugués de estilo brasileño que es el equivalente a nuestro particular castellano.

Julia, una joven mujer a la que la vida la distinguió con una cómoda posición social y económica, ve alterada su existencia con la llegada de su segundo retoño, una niña hermosa a quien llaman “Mandy”, diminutivo de Amanda. El bebé, sin embargo, no resulta ser un ser “normal”, o al menos con las características propias de los niños de su edad.

A través del crecimiento y desarrollo de “Mandy” se suceden los extraños acontecimientos que caracterizan a la novela, en donde se plantea la posibilidad -siempre debatida y nunca comprobada- de que el espíritu de una niña brasileña fallecida trágicamente, se reencarne en la pequeña nacida poco después en Corrientes.

El mundo se complica para Julia y su hija, quienes deben luchar contra los prejuicios, la incomprensión ajena y la propia y dolorosa búsqueda de la identidad. Una muñeca de porcelana, bella y misteriosa, se suma al trío de personajes centrales y se convierte en eje del conjuro que rodea a la niña.

Es para el elogio la muy buena caracterización de los personajes, el relato minucioso y prolijo, y la habilidad para conducir al lector a través de más de trescientas páginas, a un final posible, dentro de una fantasía que para muchos puede o podrá ser realidad.

Esta es la opera prima de Marina Nill, periodista y confesa y vocacional escritora desde su misma infancia. Vale la pena ingresar en su mundo fantástico, a través de “Llamaradas de Recuerdos”, y apasionarse con los conflictos que envuelven a sus personajes. Su labor de escritora la ubica en un sitial importante dentro de la literatura regional y hará esperar al lector, con entusiasmo, su próxima entrega literaria.