Conocía a grandes rasgos la trama de Bufeos, pero cuando empecé la novela ya no pude soltarla. Es atrapante, adictiva, de rápida comprensión.

El estilo de Marina es sencillo, limpio, y directo; nada de retóricas innecesarias. Eso me encantó.

Es fácil meterse en la piel de los personajes: sentir sus emociones, vivir con ellos cada giro de los acontecimientos. Se advierte el trabajo de investigación previa realizado por la autora para describir el contexto y el escenario en el que se desarrolla la historia.

Me encantó leer esta novela porque describe lugares y situaciones que conozco bien, y de algún modo, siento que reflejan mi hogar con sumo detalle.

Por otra parte, percibí algo más: un mensaje implícito a lo largo de largo de la trama, una invitación entre líneas a mirar más allá de los prejuicios de nuestra época, una reflexión oculta, que me arriesgaría a llamar espiritual.